Tips, consejos y trucos para simplificar la vida. Cómo simplificar la vida ha mejorado mi vida.
La vida puede asemejarse a una pequeña embarcación que atraviesa una fuerte tormenta.
Un marinero experimentado sabe que, para que el peso no hunda la embarcación, tiene que soltar las cargas.
Para mantenernos a flote en esta vida, muchas veces debemos de soltar las cargas y reconsiderar nuestras prioridades.
¿Y a ti qué cosas te están complicando la vida? ¿Los estudios? ¿Un trabajo estresante? ¿Tus responsabilidades familiares? ¿Apuros económicos?
Bueno, es momento de reconsiderar tus prioridades.
¿Qué cargas debes dejar ir?
Asegurate de no descuidar tus prioridades. Tu salud, tu familia, tu espiritualidad o bienestar emocional.
Algo que descubrí es que a veces yo mismo me complicaba la vida. Pero haciendo pequeños cambios logré ir arrojando de mí esas cargas.
No siempre sabemos qué cosas desechar de nuestra vida.
Por eso, te comparto estos consejos para simplificar la vida que me han funcionado. Aún sigo en este proceso.
Recuerda que debes ir a tu ritmo, y escoge unos tips para simplificar la vida que creas que puedes hacer.
Puedes guardar esta página en favoritos y continua con el resto de los consejos para una vida simple.
Primero, ¿qué es simplificar la vida?
Una vida simple o sencilla está enfocada en lo más importante, para algunos es la familia, su salud física y mental, o su espiritualidad.
¿Cómo puedes simplificar tu vida para ser más feliz? Es cierto que no lograrás simplificar tu vida de la noche a la mañana.
Pero si aplicas algunos de estos consejos para una vida simple, verás buenos resultados, algunos al poco tiempo y otros a largo plazo.
Sentirás más libertad, felicidad, y un sentido de satisfacción.
De más está decir que serás más productivo.
La simplicidad es hacer el viaje de esta vida con el equipaje suficiente.
Charles Dudley Warner
Ahora sí, aquí tienes 21 maneras de simplificar la vida
1. Establece tus prioridades.
Para comenzar debes pensar qué es lo más importante en tu vida.
Podríamos decir que en los diferentes ámbitos de la vida contamos con algunas prioridades. ¿Cuáles son las más importantes para ti en este momento? ¿Inviertes tiempo suficiente en esta prioridad? ¿Gastas parte de tu tiempo en cosas que no contribuyen a tus prioridades?
2. Ponte metas mensuales.
¿Alguna vez has hecho un ‘propósito de año nuevo’?
La mayoría falla.
Mejor ponte 1 a 3 metas cada mes.
De esta manera puedes dividir esos ‘propósitos’ en metas pequeñas. Será más fácil de manejarlos y cumplirlos. Y por fin, lograrás aquello que tanto has deseado.
3. Escribe una lista de tareas pendientes antes de acostarse.
En lugar de tardar 10 minutos haciendo una lista de tareas por la mañana (cuando probablemente ya podrías empezar a trabajar), escribe tu lista de tareas antes de irte a la cama.
Así saldrán los pendientes de tu cabeza y tendrás un sueño mucho más tranquilo.
4. Organiza tu día.
Cuando descubras qué es lo más importante para ti, analiza cómo es un día en tu vida y fíjate en tus actividades.
¿Hay algo que puedas eliminar o delegar?
A veces está bien pedir ayuda o pagarle a alguien que haga parte de nuestro trabajo. No somos máquinas que podemos hacerlo todo.
En este artículo te muestro 18 formas simples de ser más organizado.
5. Sigue una rutina matutina simple y rápida.
¿Has escuchado sobre las rutinas matutinas?
Algunos personas ‘exitosas’ presumen de elaboradas rutinas matutinas de hasta 3 horas. Pero siendo realistas, no todo mundo puede hacerlo.
Plantéate hacer una rutina matutina sencilla. Simplifica las cosas e incorpora hábitos saludables en tus mañanas.
6. Planifica tus entrenamientos.
Si vas al gimnasio (o te ejercitas en casa) sin un plan en mente, sucederán 2 cosas:
- Ni siquieras lograrás cruzar la puerta (o postergarás tu entrenamiento en casa).
- Te sentirás frustrado porque no sabes por dónde empezar.
Programar tus entrenamientos en tu planificador o calendario te ayudará a sentirte comprometido y te asegurarás de sentirte preparado.
7. Simplifica tu casa.
No te estoy diciendo que te vuelvas minimalista extremo y tires todo por la ventana. No, de eso no se trata simplificar tu casa.
Solo elimina cosas que no utilizas. Algo conocido como decluttering.
El término «decluttering» significa deshacerte de cosas inútiles o cosas que ya no utilizas, aquellos objetos que invaden tu habitación y que no son necesarios en tu vida.
Propónte lo siguiente: Despeja o limpia tu casa 15 minutos al día. Después de unos días, notarás la diferencia. Verás que será liberador dejar ir cosas que no necesitas, y ni utilizas.
8. Ordena tu armario.
¿Sientes que pierdes mucho tiempo buscando qué ponerte?
Liberar tu espacio es una sensación increíble.
¿Has escuchado el método konmari, de Marie Kondo? En su libro La magia del orden habla sobre la teoría de “la chispa de la alegría». Esto consiste en que si una prenda no te hace feliz, déjala ir. Así de simple.
9. Dobla tu ropa de la manera correcta
Aquí otro pequeño consejo de Marie Kondo: en lugar de doblar la ropa y colocarla por encima de la otra, dóblala y guárdala parada.
Verás cuán sencillo será encontrar lo que buscas sin revolver la ropa tratando de sacar algo desde el fondo.
10. Inicia un “armario cápsula”.
Un armario cápsula contiene prendas que se pueden combinar fácilmente entre sí para crear una infinidad de outfits diferentes.
Usar prendas básicas que no pasan de moda.
La idea es calidad sobre cantidad.
Saray Martín, ilustradora y autora del libro El método del armario cápsula promueve entre 33 y 40 piezas, incluyendo zapatos y accesorios, sin contar la ropa interior y ropa deportiva. Un asesor de moda para hombres recomienda sólo 25 piezas. ¡Esta idea me ha encantado! Seas o no minimalista esta idea es genial.
11. Cancelar las suscripciones a correo electrónico.
Los correos electrónicos pueden consumirte demasiado tiempo. Simplifica tu bandeja de entrada y date de baja a las suscripciones de correos electrónicos comerciales que no necesites.
12. Deja de invertir demasiado tiempo en las redes sociales.
¿Te has percatado cuánto tiempo pasas revisando tus redes? ¿Por qué no mejor planificas un poco de tiempo al día a esa actividad? Así podrías dedicar tiempo a las personas que más te importan en la vida, como tus familia, padres y amigos.
13. Elabora un presupuesto simple. Usa la regla de 50 / 30 / 20.
Aún me sigo preguntado por qué no me enseñaron en la escuela a hacer un presupuesto personal.
Aunque hay presupuestos cuidadosamente elaborados, hay uno muy simple que consiste en gastar el 50 % de tus ingresos mensuales en gastos de supervivencia, el 30% en estilo de vida y el 20% en ahorros.
Claro, siempre debes adaptarlo a tus circunstancias actuales y puedes usar el presupuesto que más te funcione.
14. Aprende a vivir con menos.
Cambia las cosas materiales por experiencias.
Dedica tiempo de calidad a tu familia y amigos, a tus pasatiempos y pasiones. Disfruta tus días al máximo.
Para eso no se necesita mucho dinero.
Aprende a administrar bien tu dinero y no gastar más de lo ganas. Es una pésima idea endeudarte innecesariamente. Recuerda: no necesitas el último iPhone ni el outfit de moda.
15. Lleva un estilo de vida frugal.
El estilo de vida frugal consiste en consumir de manera responsable y ahorrativa.
No se trata de ser tacaño ni comprar lo más barato. De hecho, la persona frugal prefiere la calidad porque eso durará por más tiempo.
Básicamente la persona frugal se centra en reducir gastos al máximo y llevar una vida sencilla. También busca como optimizar más su tiempo.
16. Practica el minimalismo.
A diferencia de la persona frugal, la persona minimalista trata de simplificar las cosas al máximo y centrarse solo en las cosas esenciales.
Menos es más.
Puede que gaste más dinero que una persona frugal, pero mantiene las cosas materiales al mínimo.
Ahora bien, el minimalismo va más allá de los gastos. El minimalismo funciona como una mentalidad. Y se aplica en diversas ámbitos. Se ve en la decoración del hogar, la ropa, la comida, el diseño, la música, el arte y un sinfín de cosas.
El minimalismo es una forma de simplificar la vida. ¡Reduce las cosas y quita lo que no es esencial en tu vida!
Algunos prefieren convertirse en minimalistas frugales.
17. Reduce la velocidad.
Muchos nos la pasamos corriendo tratando de hacer mil cosas al mismo tiempo, mientras absorbemos tanta información como nos sea posible.
¡Detente!
Sólo por unos minutos piensa en qué cosas de la vida estás persiguiendo.
Haz un plan para bajar la velocidad y seguir tus metas. Recuerda que las prisas pueden hacer que las cosas nos salgan mal. Los errores pueden ser más costosos, pues nos hacen perder tiempo y pueden complicarnos la vida.
18. Dedícate tiempo.
Puede que planifiquemos muchas cosas por hacer que terminemos olvidándonos de nosotros mismos.
Pero es importante dedicar tiempo a nuestra salud física y mental.
Asegúrate de apartar tiempo para ti, por los menos 20 minutos al día. Puedes usar ese tiempo para salir, orar, leer, escribir, lo que sea que te guste y te llene de satisfacción.
Lo repetiré, ¡dedícate tiempo!
19. Cuida tu alimentación.
Lo sé, por todos lados nos dicen: lleva una dieta balanceada.
Pero es un consejo sabio.
Escoge comidas naturales. Evita aquellas con conservadores, sabores artificiales y químicos con nombres extraños.
También evita la comida chatarra, sodas y frituras. Cocina tus comidas siempre que puedas y come frutas crudas. Toma mucha agua.
Planea tus comidas saludables usando nuestros planificadores.
Ah, solo no te vuelvas obsesivo y sé equilibrado.
20. Simplifica tus comidas.
Los alimentos son deliciosos, pero a veces nos complicamos la vida tratando de preparar alimentos muy elaborados.
No hay nada de malo en hacerlos de vez en cuando. Pero en el día a día ¿por qué no hacer las cosas más simples?
Una forma de simplificar los alimentos es usar menos ingredientes. También puedes cocinar para varios días de la semana o hacer combinaciones con los diferentes alimentos que te “sobran”. Esto también es de las mejores formas para ahorrar dinero y tiempo.
21. Simplifica tu interior.
Imagina que tu interior es esa pequeña embarcación. Puede que, a veces, te sientes tan abrumado, a punto de hundirte. Quizá la razón son las pesadas cargas emocionales.
Si tienes mucha carga emocional desahogate con otros, escríbelas en tu diario o simplemente déjalas ir (tal como lo harías con objetos).
Aprende a perdonar a otros y, sobre todo, a ti mismo/a. No tiene ningún sentido vivir en el pasado. Después de todo, no hay manera de cambiarlo. Lo importante es lo que haces a partir de ahora.
Por otra parte, las cosas positivas nos motivan e inspiran. Deja en tu interior solo aquello que te haga feliz. ¡Esto es simple, pero muy poderoso!
Conclusión
Una vida simple me hace más feliz. Trato de no complicarme la vida con cosas que no me aportan ningún valor.
A veces lo que nos complica la vida son objetos, el consumismo, metas equivocadas o cargas emocionales.
Desde que apliqué en mi vida algunos de estos consejos, me siento mucho mejor. Cada vez que pierdo la motivación, miro mi lista y lo intento de nuevo.
Para resumir, recuerda que lo primero es definir tus prioridades. Detente un momento y piensa qué estás persiguiendo. Luego, toma acción y comienza a soltar cargas.
Es divertido, satisfactorio y liberador.